El papa Francisco designó al primer cardenal negro en la historia de la iglesia católica.
Cardenal Gregory: la grey que se me ha confiado es mi primera responsabilidad – Vatican News
Entrevista con el Cardenal Wilton Gregory, Arzobispo de Washington, Estados Unidos, creado Cardenal en el Consistorio Ordinario Público que el Papa Francisco presidió este 28 de noviembre de 2020.
Renato Martinez – Ciudad del Vaticano
“Seguiré visitando las parroquias, teniendo reuniones, trabajando en el Centro Pastoral de la Arquidiócesis y seguiré dialogando con todos los órganos consultivos de la Arquidiócesis. Así que aun siendo miembro del Colegio Cardenalicio, cuando esté en Washington me dedicaré a mi servicio pastoral y seré el Arzobispo de Washington”, con estas palabras el Cardenal Wilton Gregory, Arzobispo de Washington, Estados Unidos, recientemente incorporado al Colegio Cardenalicio, explica – en la entrevista concedida a nuestra colega del programa inglés, Sor Bernardette Mary Reis – cómo continuará su ministerio pastoral en la Arquidiócesis y sus responsabilidades como consejero del Papa.
Su Eminencia, usted es ahora una de las pocas personas en la tierra que se incorpora al Colegio Cardenalicio; tendrá la responsabilidad de aconsejar al Papa y eventualmente elegir uno. ¿En qué medida su ministerio como Arzobispo estará condicionado por este nuevo ministerio al que ha sido llamado?
R. – Creo que mi ministerio en Washington no estará directamente involucrado. Espero que el hecho de ser miembro del Colegio Cardenalicio aumente el afecto y la devoción de la gente de la Arquidiócesis de Washington por el Papa Francisco y su ministerio Petrino. Pero no creo que mis actividades diarias como Arzobispo de Washington cambien mucho. Seguiré visitando las parroquias, teniendo reuniones, trabajando en el Centro Pastoral de la Arquidiócesis y seguiré dialogando con todos los órganos consultivos de la Arquidiócesis. Así que aun siendo miembro del Colegio Cardenalicio, cuando esté en Washington me dedicaré a mi servicio pastoral y seré el Arzobispo de Washington.
Eminencia, el informe McCarrick fue publicado poco después de que el Papa lo nombrara para formar parte del Colegio Cardenalicio, lo que es ciertamente un acto de confianza de su parte, considerando que desafortunadamente McCarrick fue su predecesor. En la declaración que hizo después de leer el informe, recordó que todo sacerdote, en el momento de la ordenación, «promete al Padre celestial poner siempre a su precioso pueblo en primer lugar». ¿Cómo se imagina guiar el camino de la Arquidiócesis de Washington y cómo se imagina su compromiso, particularmente a la luz de la definición que usted mismo dio del sacerdote?
R. – En esa respuesta a la publicación del Informe McCarrick, quise recordar a la gente, a mis sacerdotes, y sobre todo a mí mismo, que mi relación con la grey que se me ha confiado debe ser mi primera responsabilidad como sacerdote, como ministro ordenado; debo protegerlo, cuidarlo, fortalecerlo, animarlo a seguir viviendo y practicando nuestra fe; debo invitarlo a obras continuas de caridad y solidaridad social, y en esto la Arquidiócesis de Washington tiene una larga y hermosa historia. Así que esa declaración fue una promesa, pero también es un recordatorio para mí. No sólo escribía sobre los sacerdotes en general: también lo escribía para el sacerdote Wilton Gregory.
¿A quién recurre personalmente para inspirarse en su ministerio de pastor y guía en la Iglesia Católica?
R. – Tengo un guía espiritual al que debería ver con más frecuencia, pero obviamente estas dos últimas semanas no han sido una «administración normal» para mí. Pero también le pido a mis hermanos sacerdotes y Obispos. Me ha inspirado mucho el nivel de devoción, bondad y celo genuino de nuestros sacerdotes y diáconos. Los encontré hombres de gran integridad y gran dedicación a la misión de la Iglesia. Mire, me inspiran especialmente en estos meses en los que estuvimos cerrados y vivimos con las restricciones de Covid. Los sacerdotes, diáconos y religiosos de la Arquidiócesis que comparten conmigo la pastoral de nuestro pueblo, me han inspirado con su creatividad. Han hecho «experimentos», han involucrado a su gente. En algunas ocasiones se dieron cuenta de lo difícil que es este momento, porque ninguno de nosotros – Obispos, sacerdotes, diáconos – nos hemos encontrado nunca ministrando en estas circunstancias. No tenemos un manual que nos diga cómo proceder. Sin embargo, los sacerdotes, diáconos, religiosos y religiosas, laicos, ministros, gente del Centro de Pastoral, todos han sido muy creativos en su deseo de cumplir sus responsabilidades con la Iglesia local de la mejor manera posible para las circunstancias en las que vivimos.
Normalmente, los que responden a esta pregunta hablan de sus héroes. Lo que oigo es que sus héroes son los mismos miembros del pueblo de Dios al que sirve. ¿Es así?
R. – Eso es exactamente así. Son las personas que me dan valor, que me dan el «empujón» para levantarme por la mañana y hacer mi trabajo con gran entusiasmo, celo y esperanza.