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Con este grito en voz alta dejo la bola en la cancha de los que deciden, de que saquen su lado de sensibilidad y solidaridad por la cultura y sus activos que son seres humanos, el tiempo pasa y los problemas se agrandan.

He dado varias soluciones y todas van al zafacón al parecer.

Es tiempo de pasar a la acción, de la promesa a la realidad, de la música de fondo al primer plano, del olvido aposta, a refrescar la memoria, dejar el juego de hacerse el loco, de que las palabras son palabras y se la lleva el viento, me pregunto si los que tienen la responsabilidad de ir en auxilio en tiempo de tempestad por cualquier ciudadano están consciente de lo que es la cultura, el folklore, el arte, la identidad, el orgullo de la patria, la razón de ser como pueblo.

Si saben lo que es el hambre, la inamovilidad, las deudas, la impotencia, la penuria,  la tristeza, la desesperación, el estrés, la presión, la humillación, perder la fe, la esperanza, pasar de positivo a negativo, de pasivo a agresivo, de la paz a la guerra, de la paciencia a la impaciencia, de la poesía y la música al combate, cuando se pierde la fuerza moral, la dignidad, la ética, la prudencia, hay momentos que sale sin saber hacia va y en busca de que porque se perdió la noción del tiempo y entra en acción si es mejor estar vivo siendo una escoria social o un soldado muerto peleando por sus derechos y los de sus hijos.

De lo que sí estoy muy seguro es que ellos, si los que pueden prender la maquina porque son el combustible y la bujía a la vez de la economía junto a sus familias y amigos tienen sus tres calientes con postre y algo mas muy segura.

10 meses sin producir ni uno, deprime a su máxima expresión, la tristeza se apodera del alma, invita a delinquir, a la violación de las leyes, cuando un ciudadano tiene que ver sus niños, su esposa y familia llorando por leche, por comidas, por medicinas, le cortan el agua y la luz, abrumado por las deudas y la impotencia, es un padre desesperado que la terrible situación económica termina acorralándolo y lo invita a cometer errores que nunca pensó que lo haría.

El músico, el cantante, el bailarín, el sonidista, el tarimero, el luminotécnico, el mozo, el coreógrafo, el animador, el comunicador, el relacionista público, el chofer, el ayudante, los chiriperos, el carpero, la secretaría, el promotor, el maquillista, el peluquero, el compositor, la modista, si ellos juntos al hombre de a pies creativos, que hacen de la cultura su modo viviente están con el alma muerta, su silencio es un peligro, porque los que más sufren no salen en televisión ni redes, no están en el día día frente a las cámaras ni medios periodísticos, son humanos con talentos y dignidad.

No es que yo si jodo con eso, no es que insisto sobre lo mismo, no es que llueve sobre mojado, no es que embromo, no es que molesto, no es por mortificar, no es pidiendo ni mendigando, no es suplicando, ni buscando limosna, es que soy la voz de miles de familias, de gente que en mis tantos año en este negocio me llaman y mi WhatsApp es donde se pueden desahogar, los 48 mil y pico de kilómetros cuadrados de las gentes de la música y el entretenimiento tienen mi teléfono y están desesperado no soportan esta a tormentosa situación.

No estoy diciendo que la solución es quitar el toque de queda, no es abrir para hacer eventos o bailes y poner su vida en peligro, es buscar una solución digna ya, que no es el dar cinco mil pesos mensuales a unos cuantos.

Cuando termine la pandemia tendremos los cementerios llenos de artistas y gentes del entretenimiento, las cárceles y en los tribuales a los protagonistas de la cultura si no se reacciona ya porque no tienen otra salida que la muerte o violar las leyes.

Se hunde el barco donde se transporta la identidad cultural, de mi querido capitán.

#REFLEXIONESLETALE DE LUIS MEDRANO


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